Que el tomate es uno de los ingredientes estrella del verano no lo duda nadie. Que si gazpacho, salmorejo, ensaladas (como la siempre rica caprese), salpicón… Y cómo no, uno de los más frecuentes a la hora de preparar un buen plato de pasta. Pues eso precisamente vamos a hacer hoy, cocinicas, unos rigatoni con salsa de tomate y albahaca que son una auténtica ricura. Y además aprovechamos para celebrar el día del tomate con el Reto International Day. ¡Que no falten motivos de celebración! Un tomate bien rico simplemente troceado con un chorrito de aceite y sal es una delicia. Por no hablar de las tostadas de tomate rallado, que para mí son uno de los mejores desayunos que existen. Vamos, que tienes mil maneras de comerlo, pero yo que tú me gustaba estos deliciosos rigatoni con salsa de tomate y albahaca, porque con pocos ingredientes tienes un plato muy sabroso, sencillo y que fijo que triunfa. Solo falta añadir parmesano encima (que no falte nunca), coger el tenedor, ¡y a disfrutar!
Corta la cebolla y el ajo en cuadrados pequeñitos. Pon una cazuela a calentar con unas 4 cucharadas de aceite y añade la cebolla, el ajo y un poco de sal. Sofríe todo junto a fuego medio unos 10 minutos, hasta que esté blandito y bien pochado. Cuando la cebolla y el ajo estén bien hechos, añade los tomates, sal, pimienta y el azúcar. Cocina todo a la misma intensidad unos 15 minutos, removiendo de vez en cuando y partiendo un poco los tomates y fuera necesario. Una vez trascurrido ese tiempo, corta las hojas de albahaca en trozos y añádelos a la salsa. Cocina 5 minutos más y baja el fuego al mínimo, lo justo para que se mantenga caliente. Mientras se hace la salsa, pon la pasta a cocer en una olla con abundante agua con sal los minutos que indique el fabricante. Cuando esté lista, escúrrela y añádela a la cazuela de la salsa. Remueve todo junto un par de minutos que se integren los sabores y sirve con parmesano en polvo y un par de hojas de albahaca. Ahora vendrá el cocinicas listo de turno a preguntar: ¿y no puedo echarle albahaca seca, que tengo un bote por ahí y blablabla…? ¡Pues no, no puedes! El sabor y el aroma de la albahaca fresca no te la va a dar la seca, así que no hay cambio de valga. Tú le añades fresca y se acabó. ¡Le queda genial! Lo suyo es comer este plato de pasta en cuanto se prepara, no te recomiendo dejarlo de un día para otro ni nada de eso. Peeeero lo que sí se puede hacer es preparar más cantidad de salsa y congelarla. Así, cuando te apetezca este plato, solo tienes que descongelarla y cocer la pasta. ¡Aún más sencillo, cocinicas! ¿Qué tú tienes espaguetis en casa y quieres gastarlos? Sin problema. ¿Qué prefieres tallarines, macarrones o la pasta que más rabia te dé? Adelante, quedará igual de rico. Ahí sí que tienes toda la libertad del mundo. Eso sí, cocinicas, recuerda respetar siempre el tiempo de cocción, que no se te vaya el santo al cielo y se queda la pasta media hora en la olla. Yo he utilizado tomates naturales enlatados por comodidad, pero no hay problema en hacerlos con tomate natural. Solo tienes que escaldarlos, quitarles las pepitas, y a partir de ahí los añades a la olla y sigues los mismos pasos. ¡A tu elección!Rigatoni con salsa de tomate y albahaca
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Pasos
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Y mira lo fácil que es preparar unos rigatoni con salsa de tomate y albahaca bien ricos y sabrosos que seguro que te encantará. ¡Ya estás tardando en prepararlos! Ya sabes que tienes las puertas abiertas del Instagram y del Facebook de Fresas y Aceite para comentar lo que quieras. Y si tienes antojo de alguna receta concreta, no dudes en pedirlo.
¡Hasta pronto, cocinicas!
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