Abre el frigorífico y dime qué ves, cocinicas. Después del ajetreo de los días navideños, seguro que hay bastantes ingredientes de que te sobró esto por aquí, esto por allá, que por separado no te arreglan nada y no sabes qué hacer con ellos. ¿Lo tiras a la basura? ¡Ni se te ocurra! Siempre hay que buscar formas de aprovechar toda la comida, cocinicas, sin derroche ni desperdicio. ¿Qué te parece si lo conviertes en una deliciosa lasaña? Vamos, pocas ideas más ricas de aprovechamiento hay que una buena lasaña. En mi caso, tenía restos de pollo asado, un puñadito de setas, una bolsa de espinacas, restos de queso… Nada del otro mundo, pero salió un plato para chuparse los dedos. Para la bechamel, sigue los pasos de esta receta para 4 personas, muy fácil y éxito asegurado. Como nos gustan a nosotros las cosas, cocinicas: fáciles, sencillas y muy sabrosas. Así que ya sabes, pon en marcha tu cabecita y regálate una riquísima lasaña que le alegra el día a cualquiera.
Desmenuza el pollo asado con unas tijeras o un cuchillo y reserva. Pica la cebolla y el ajo en trozos pequeñitos. Ponlos a pochar en una sartén a fuego medio con un chorro de aceite, sal y pimienta. Trocea las setas. Cuando la cebolla y el ajo estén bien pochados, añade las setas a la sartén. Cuando las setas hayan soltado parte de su agua, añade las espinacas frescas, un toque de sal y pimienta. Deja que se cocine todo junto removiendo de vez en cuando hasta que las espinacas reduzcan. Cuando las verduras estén listas, añade el pollo y remueve que se integre todo. Reduce el fuego, ya que el pollo ya está cocinado. Pon a remojar las placas de lasaña en una fuente honda con agua caliente para que se ablanden el tiempo que indique el paquete. Deja reposar el relleno de la lasaña mientras preparas la bechamel para cuatro personas siguiendo la receta que te indico anteriormente. Saca las placas de lasaña de agua y pasa al montaje. Echa un poco de bechamel en una fuente para horno y extiéndela por el fondo para que no se pegue la lasaña. A continuación, ve montando en el siguiente orden: 4 placas de lasaña, relleno de pollo y verduras, un poco bechamel, 4 placas de lasaña, relleno de pollo y verduras, un poco de bechamel, 4 placas de lasaña y la cubres con el resto de la bechamel, el emmental y el parmesano rallado. Pon el horno en modo grill a 200º y mete la lasaña unos 5-10 minutos, hasta que la parte superior esté bien gratinada. Ya sabes lo que tienes que hacer si quieres conservar tus manos intactas, cocinicas. Efectivamente, huir de los cartones de la bechamel comprada. ¡Con lo rica y fácil que es la casera! No me decepciones, cocinicas, yo confío en que te saldrá una bechamel de 10, así que no quiero volver a ver que la coges ya preparada. ¡La vagancia fuera! Es una lasaña de reciclaje, casi todo son restos que tenía rondando por el frigorífico, así que puedes hacerla con estos ingredientes o adaptarla a lo que tengas por casa, por supuesto. Y si quieres hacerla con pollo, pero no tienes sobras, te asas unos filetes y listo. ¡Lo importante es no complicarse la vida! Si haces las cuentas, cocinicas, verás que la lasaña solo tiene 12 placas de pasta, no 14. ¿Y por qué te dije que hidrataras 14? Pues porque luego se te puede pegar alguna, o se te rompen y ya la lías. Mejor que sobre a que falte, nunca se sabe. Además de estar riquísima, la lasaña tiene la gran ventaja de que congela perfectamente, así que no dudes en preparar de sobra y así, un día de esos que estás hasta arriba, la sacas del congelador y comes de lujo. ¡Son todo ventajas!Lasaña de pollo asado, espinacas y setas
Ingredientes
Pasos
Sugerencias y comentarios
Y así es como de cuatro restos del frigorífico sale un plato para hacerle la ola de lo rico que está. ¿Quieres un trozo? Pues toma, yo te pongo uno, ya verás que está riquísimo. Y como siempre, sabes que tienes las puertas abiertas del Instagram y del Facebook de Fresas y Aceite para comentar lo que quieras.
¡Hasta pronto, cocinicas!
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