Primer paso de la receta de hoy: ve a comprar una buena barra de pan porque la necesitarás para mojar esta salsa tan rica. Avisado quedas, luego no quiero ni una queja. Además, tienes que rebañar el plato como tú sabes, cocinicas, con un giro de muñeca al final para pillarlo todo bien. Estos jamoncitos de pollo a la cerveza son muy sencillos, sabrosos y gustan a prácticamente todo el mundo. Y que apenas tienes que hacer nada, todo va haciendo chup chup solito y tú puedes dedicarte a otras cosas mientras tanto. El pollo es una carne económica, sana y muy versátil, puedes prepararla de mil formas diferentes y con cerveza siempre queda bien. No me digas que no te lo pongo fácil, cocinicas, no tienes ninguna excusa. Así que anímate a prepararlos, porque te aseguro que se quedarán fijos ya en tu cocina. ¡A disfrutar de este rico plato!
Cubre de aceite el fondo de una olla grande y ponlo a calentar. Salpimenta los jamoncitos y, cuando el aceite esté caliente, mételos en la olla y dóralos bien por todas partes durante unos minutos. Mientras se doran, pica los ajos y la cebolla en trozos no muy pequeños. Pica también un puñadito de perejil y resérvalo para después. Cuando el pollo esté dorado, sácalo de la olla y déjalo reposar en una fuente. Añade en la olla la cebolla y los ajos, un poco de sal y deja que se poche a fuego medio unos minutos, hasta que la cebolla se vea bien hecha. A continuación, retira la olla del fuego, añade el pimentón y remueve todo bien. Vuelve a poner la olla al fuego y añade la cerveza, el caldo de pollo y el perejil picado. Mete de nuevo los jamoncitos de pollo. Mezcla un poquito, tapa la olla y deja que se cocine todo junto a fuego medio unos 40 minutos. Cuando el pollo esté hecho, retíralo a la bandeja o al plato en el que lo vayas a servir. Quita la olla del fuego, tritura la salsa con una batidora y viértela sobre la carne. La cocción la puedes hacer también en una olla exprés, que tardará menos tiempo. Personalmente, me gusta más a fuego lento, pero tú hazlo como mejor te parezca, cocinicas. Siempre como te sientas más cómodo y te resulte más sencillo. Para hacer honor a mi tierra, la cerveza tenía que ser una Alhambra tradicional, por supuesto. Tú añade la que más te guste. Puedes jugar con el amargor y la graduación de los diferentes tipos de cerveza para darle a tu salsa los matices que más te gusten. ¡Tú mandas, cocinicas! El pollo congela perfectamente, así que no dudes en preparar de sobra y ya tienes un plato estupendo para otro día. Como acompañamiento, las patatas asadas le van de lujo, aunque también le puede ir de maravilla patatas fritas, en puré, arroz blanco, un poco de pasta, una ensalada… Eso sí, el pan que no falte.Jamoncitos de pollo a la cerveza
Ingredientes
Pasos
Sugerencias y comentarios
El pollo en salsa siempre triunfa, así que ya sabes, a preparar esta rica receta que seguro que te chupas los dedos y dejas el plato reluciente. Como siempre, tienes las puertas abiertas del Instagram y el Facebook de Fresas y Aceite para enterarte de todo lo que se cuece por aquí. Y recuerda que puedes pedir la receta que más te apetezca para la sección ¡Oído cocina!
¡Hasta pronto, cocinicas!
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